El Cronopio

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Leía Rayue­la, sen­ta­do en la mesa de enfren­te.
Fuma­ba taba­co negro. Escu­pía humo gris. Bebía cer­ve­za rubia.
Yo hojea­ba Bes­tia­rio, fuman­do ciga­rri­llos rubios, sabo­rean­do cer­ve­za negra.
De pron­to lo des­cu­brí. Soplé humo gris hacia su mesa y seguí leyen­do, como dis­traí­da.
Cerró el libro. Lo puso bajo el bra­zo. La bote­lla en una mano y el vaso en otra iza­ron al cuer­po moreno. Se acer­ca­ron a mi mesa y son­rie­ron.
Nues­tros humos se mez­cla­ron.
Las pala­bras salie­ron de las bocas, copu­la­ron con la cer­ve­za y se mul­ti­pli­ca­ron veloz­men­te.
Lue­go vino la risa, como espu­ma.
Cre­ció y comen­zó a caer­se de la mesa.
Cuan­do inun­dó el bar nos echa­ron.
Lle­na­mos de espu­ma las calles. Res­ba­la­mos cues­ta aba­jo, has­ta el bor­de mis­mo del río. Jus­to fren­te a su casa.
Encon­tra­mos más hijos de pala­bras flo­tan­do sobre la espu­ma.
Los tra­ga­mos y vol­vie­ron a repro­du­cir­se.
Entra­mos a su casa.
El calor nos qui­tó la ropa. El sudor coque­tea­ba con la espu­ma y las pala­bras.
Las pala­bras olvi­da­ron su timi­dez. Se incrus­ta­ron de lleno en la boca opues­ta. Cir­cu­la­ron por el cuer­po. Bai­la­ron en el estó­ma­go una dan­za pri­mi­ti­va y pro­vo­ca­do­ra.
Baja­ron has­ta la entre­pier­na y se con­vir­tie­ron en vol­cán.
Tem­bla­ron y rugie­ron cada vez más fuer­te, inten­tan­do esca­par.
Hicie­ron erup­ción y pati­na­ron en sudor. Varias veces. Toda la noche.
Al ama­ne­cer sólo ceni­zas, coli­llas mal apa­ga­das, vasos vacíos y lava por toda la casa.
Me des­pe­dí del Cro­no­pio y empren­dí la reti­ra­da, cues­ta arri­ba.
Toda­vía había espu­ma por las calles.
Toda­vía que­da­ban pala­bras sin repro­du­cir­se.
Por eso vuel­vo cada tan­to a ese bar.
Y siem­pre está ahí. Con Rayue­la, taba­co negro y cer­ve­za rubia, espe­ran­do la señal.

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Jenny Wasiuk. Escritora misionera, nacida en Campo Grande y radicada en Posadas.  Ha publicado cuatro libros: “Ofrenda de Palabras” año 2003 y  “Travesía hacia tu piel”año 2004 - Ambos en formato artesanal.  “Pyporepó” año 2009.  “Cardinales” año 2010, este último en co-autoría con las escritoras Dana Salas, Vanessa Vargas Velázquez y Beatriz Bordón. Ha obtenido numerosos premios y distinciones, tanto a nivel provincial como nacional, entre ellos el "Vencejo de Plata 2005" otorgado por el Taller La Araucaria, organizador del Encuentro Internacional Cataratas del Iguazú. Actualmente integra el Programa Infantil "Gurises Felices" del IPLyC, acompañándolos en su recorrida por la provincia e incentivando a los niños a la lectura, dictando talleres, coordinando concursos o narrando cuentos infantiles.