Durante las últimas semanas coparon titulares las diversas audiencias y reuniones realizadas por altos miembros del gobierno de Estados Unidos por el supuesto peligro que puede significar la aplicación TikTok “para la seguridad nacional,” debatiendo entre sí si acaso vale la pena llegar a la última consecuencia y prohibirla, una idea que ya se viene gestando desde la época de la presidencia de Donald Trump. La posible medida, que incluye factores mucho más complejos que lo que se puede explicar en un artículo corto, hasta llegó a ameritar que el Congreso de Estados Unidos llame a Shou Zi Chew, CEO de TikTok, a comparecer ante una audiencia que terminó durando más de tres horas. Refugiándose tras una “preocupación” por la influencia de la aplicación en los jóvenes estadounidenses, legisladores del país le preguntaron al ejecutivo varias cosas que denotaban su conocimiento sobre el tema, como, por ejemplo, si la aplicación tenía acceso a señales de WiFi — algo que toda aplicación social debe tener para funcionar. Por todo este descalabro y ante la incertidumbre generada por la decisión del gobierno de atacar a TikTok, muchos usuarios comenzaron a averiguar alternativas, y una de ellas, Lemon8, alcanzó recientemente, y por primera vez, el top 10 de aplicaciones más descargadas en el país, superando a Facebook o Twitter. Hay sólo un problema para Estados Unidos: Lemon8 es una aplicación desarrollada por la empresa china ByteDance, la misma que desarrolla TikTok.