El gobierno de Emmanuel Macron anunció medidas para subir la edad jubilatoria desde los 62 hasta los 64 años, provocando una ola de protestas en diferentes ciudades del país. Las reformas fueron apoyadas por los sectores conservadores del Congreso, que le dieron media sanción. Macron expresó que la medida está diseñada para “evitar el colapso del sistema de pensiones,” pero si el sistema de pensiones necesita de medidas así para sobrevivir, ¿cuál es el punto?