A pesar de todos los errores que tanto católicos como no católicos le puedan atribuir al primer papa de las Américas, no hay duda que la Iglesia Católica logró romper muchos esquemas gracias a su labor como pontífice. Tampoco hay duda de la calidad del trabajo de quien fuera Arzobispo de Buenos Aires como representante del sentimiento de ser argentino y de no negar las verdaderas raíces de uno. A por diez años más.